Nuevamente, representantes de Relaf, Unicef y el Servicio Nacional de Menores de Chile (SENAME) se reunieron en Santiago para dar un nuevo paso en la Iniciativa Regional “Paremos con la internación de bebés”. Del 14 al 17 de agosto, se llevó a cabo la segunda etapa de capacitación en el marco de la Prueba Piloto, donde se trabajó activamente con operadores, especialistas y personal de distintas áreas involucrado en el trabajo con niños, niñas y adolescentes.
El primer día, los representantes de Relaf, Unicef y SENAME visitaron el Programa de Familias de Acogimiento de Adra, ONG sede de la Prueba Piloto. En una reunión con el personal de la institución, se compartió la historia y la modalidad de trabajo actual del Programa, presente en todas las regiones de Chile. En ese marco, se compartió la necesidad de una articulación mayor de las políticas de salud, vivienda, educación, entre otras, con aquellas que se refieren a la restitución de derechos. Así, la reunión permitió reconocer al personal de Adra como un equipo técnico de buen nivel, consolidado, con una experiencia y compromiso sobre su tarea.
El día siguiente, se realizó el seminario “Recreando oportunidades”, sobre cuidado familiar de niños, niñas y adolescentes. Entre los 80 participantes hubo operadores de los internados, familias de acogimiento, integrantes de áreas de salud, jueces de familiar y miembros de las organizaciones locales que participan de la Prueba Piloto. La apertura estuvo a cargo de Soledad Larrain, del área de Protección de Derechos de Unicef, y Magdalena Lioi Campo, jefa del Departamento de Protección de Derechos de SENAME.
A continuación Judith Aude, representante de Relaf, presentó la experiencia de Uruguay sobre acogimiento familiar, abordando su historia, los aprendizajes realizados y la propuesta de adecuación institucional. En un espacio de preguntas y respuestas, surgieron temas como la importancia de una adecuación normativa en Chile (proyecto que se está estudiando en el Congreso de ese país), la necesidad de contar con diversidad de respuestas para cada situación y la tensión existente entre la necesidad de un sustancial cambio institucional y las resistencias que surgen a partir de pautas culturales.
Luego, se pasó al siguiente tema, también a cargo de Aude: la nueva intervención social, inter-institucionalidad, protocolos y procedimientos. En ese espacio, se habló acerca de la conformación de los socios y de los posibles aliados de la experiencia piloto y la importancia de tener presente las distintas lógicas institucionales para una más fluida comunicación. Una cuestión a destacar de esta segunda instancia es la intervención de los jueces y su referencia a la necesidad de acercarse al territorio de los operadores en la articulación de las políticas universales y focalizadas.
El tercer día dio lugar a una reunión con personal de Adra y del Hogar Casa Santa Catalina, institución que aloja la Prueba Piloto. Allí, se planteó el objetivo de continuar trabajando la inter-institucionalidad, mejorando el diálogo con el Poder Judicial y la revisión del marco jurídico para su mejora. Otra de las cuestiones planteadas por las organizaciones es la necesidad de mejorar la convocatoria de las familias. En este aspecto se siguió trabajando lo propuesto durante el encuentro anterior en Santiago de Chile.
El cuarto y último día se realizó una recorrida por el Hogar Casa Santa Catalina, en compañía de sus directivos. En esa oportunidad, pudieron expresar que el convencimiento de la institución sobre transitar un cambio debe ser proyectado al conjunto de las instituciones del país. Con todo esto, la valoración que la representante de Relaf realiza es positiva: la Prueba Piloto se enfoca en niños y niñas de cero a tres años, es decir, un grupo sobre el cual las secuelas de la internación son extremadamente traumáticas. Por eso, es necesario generar aprendizajes, nuevas metodologías y formas de intervención, con una mirada política y ética respetuosa de los derechos de la infancia.