Contextualizando
Entre los meses de Octubre y Noviembre de 2010, Relaf estuvo en Guatemala trabajando junto a las organizaciones locales conociendo, reflexionando, ayudando a pensar el futuro de los cuidados alternativos en ese país.
El contexto social, económico y político es preocupante y esto afecta a las familias y a la niñez guatemalteca. Los largos años de conflicto político dejaron su secuela, la violencia criminal que involucra también a los niños y jóvenes (las llamadas “maras”), la migración en condiciones altamente peligrosas y los desastres naturales son el contexto de sobrevivencia para una gran mayoría de los habitantes de ese país. Apenas un dato para dimensionar la violencia padecida por niños y jóvenes: 1600 son las personas menores de 18 años “desaparecidas” en el año 2010. Niños, niñas y jóvenes que se encontraban, en su gran mayoría, en los departamentos fronterizos con México.
Es en ese contexto que las instituciones públicas y privadas que se dedican a la protección de los derechos de la niñez cumplen su misión. A lo descripto se suma la lucha contra la falta de transparencia y el delito: el enorme trabajo para deshacer las prácticas de salida masiva de niños y niñas hacia otros países, tráfico cubierto por el mal uso de la “adopción internacional”.
Desde Relaf, valoramos y reconocemos todo el esfuerzo de las personas y organizaciones que allí trabajan. Pero no podemos dejar de expresar nuestra preocupación por los caminos que se están emprendiendo a la hora de organizar los cuidados alternativos. La apertura del “Hogar Solidario”, cuya población llega a los 700 niños entre 0 y 18 años, preocupa y va en el sentido contrario de lo que se espera trabajar en América Latina. Una institución costosísima, cuya característica es la de una institución total: aislada en un lugar geográfico de difícil acceso, con altos paredones, cámaras de vigilancia en los pabellones….nada que permita pensar en la singularización, la autonomía, y la estimulación al desarrollo de niños y niñas. Esto, complementado con las razias de niños en las calles, denominadas “rescate” pero muy parecidas a una cacería humana, es el paradigma de lo que se debe dejar de hacer.
Confiamos en que las autoridades conducirán la organización de otras y mejores respuestas, la sociedad se involucrará en el cuidado e integración social y las ongs seguirán colaborando y proponiendo humanizar a familias y niños en situación de extrema vulnerabilidad.
Valoración del Programa de Familias Sustitutas
Las actividades de cooperación técnica realizadas en Guatemala fueron impulsadas por Unicef. Desde la Secretaría de Bienestar Social se está ejecutando un programa de Familias Sustitutas, el que se encuentra en revisión para su mejora.
La cooperación que Unicef presta al gobierno y a las distintas organizaciones de ese país, llevó a la planificación de distintas actividades para las cuales Matilde Luna fue convocada en su carácter de experta. María Sánchez Brizuela, referente de gestión integral del proyecto Relaf, aportó con su presencia material para las organizaciones y acercó los recursos de la red como una opción para conocer, intercambiar, mejorar y fortalecer las experiencias guatemaltecas.
Se cumplió con una intensa agenda de encuentros y entrevistas promoviendo en los actores locales de las Ongs e instituciones del gobierno la identificación de los obstáculos para su remoción y las fortalezas para promover el crecimiento y fortalecimiento del Programa de Familias Sustitutas en Guatemala así como otras opciones de acogimiento familiar.
Actividad académica
Junto con la Universidad Landívar, Unicef Guatemala está promoviendo la formación de recursos humanos especializados en cuidados alternativos con enfoque de derechos humanos. Para ello se está dictando un Diplomado, posgrado al que asiste un grupo heterogéneo de profesionales que trabajan y tienen responsabilidades en las instituciones del sistema: poder judicial, organismos administrativos y ongs. En ese contexto, Matilde Luna dictó un Seminario a medio término sobre acogimiento familiar. Se presentó al acogimiento desde la óptica conceptual y práctica, analizando herramientas de intervención concretas para desarrollar y fortalecer la práctica, partiendo del contexto latinoamericano y guatemalteco. La orientación general del Diplomado, prevé que los alumnos desarrollen propuestas concretas para la prevención y la provisión de cuidados alternativos en sus instituciones.
Visita a Refugio de la Niñez, Guatemala
Dentro de la agenda de trabajo en Guatemala, se realizó una visita a la sede del Refugio de la Niñez en donde se produjo un encuentro con el equipo de trabajo y directivos de la organización. El Refugio de la Niñez, tiene cuatro programas existentes (jurídico, protección y abrigo, fortalecimiento familiar y prevención e incidencia) a los que sumará un programa de Acogimiento Familiar. En esta iniciativa cuenta con la cooperación de Unicef. La expectativa, es la de reclutar 30 familias de acogimiento para el año 2011. En este sentido, Relaf compartió con el equipo el material de sensibilización y convocatoria a familias de acogimiento, para su aplicación en la comunidad.
Refugio es una organización que realizó su presentación en el Seminario 2010, sensibilizando a quienes pudieron conocer a través de su trabajo, el difícil contexto social de la niñez guatemalteca y dando a conocer los resultados de su trabajo. (Presentación disponible en la página web de Relaf)
Encuentros con organizaciones no gubernamentales en Guatemala.
Estas reuniones tuvieron, entre otros objetivos, conocer a ongs que están incursionando en la práctica del acogimiento o son potenciales ejecutores, así como analizar la situación de la niñez en cuidados alternativos desde la visión del Movimiento Social (movimiento que actúa en defensa de los derechos de la niñez). Todas las organizaciones están demostrando su vocación de abogar por los derechos, e incidir en la mejora de las prácticas que tienen como objeto la protección de la niñez.
Las organizaciones que tienen participación en la atención de niños sin cuidado parental, fortalecimiento familiar y desarrollo comunitario que participaron son: Aldeas Infantiles, Buckner, Refugio de la Niñez, Nuestros Ahijados y Camino Seguro. Sus representantes intercambiaron sobre los avances en el desarrollo de las prácticas, los obstáculos y las perspectivas futuras. Cada organización compartió con el grupo su experiencia y se plantearon estrategias para articular entre sí, compartir sostenidamente sus aprendizajes, e incidir en las políticas públicas de Guatemala. El peso mayor de la asistencia a un niños y niñas privados de familia, recae sobre ellas. Por ejemplo, de los más de 5500 niños y niñas en distinto tipo de instituciones, 4900 están en hogares de ongs, sin el apoyo del Estado y con sostén mayoritario del financiamiento de donantes del exterior.
El Movimiento Social está formado por 89 organizaciones no gubernamentales que trabajan en el campo de los derechos de la niñez. Participaron en el encuentro su coordinadora y representantes de Asociación Viva Juntos por la Niñez, Fudaespro, Embajada de Francia, Asosepredi e IPS.
En las reuniones se manifestó la preocupación por la extendida práctica de la institucionalización y la existencia en Guatemala de internados con gran cantidad de niños. Uno de los espacios, el Hogar Solidario, alberga a casi 700 niños a partir de los primeros días y hasta los 18 años de vida. Relaf ha compartido su preocupación basada no solo en la convicción conceptual de que el modelo asilar no es una buena respuesta de cuidado, sino fundada en los resultados de la visita a esa macro institución. Entre otras cuestiones, se observo que hay 200 niños menores de seis años, de los cuales unos 140 son menores de 3. El modelo asilar hace ver pronto el deterioro en el desarrollo de los niños y niñas: se observaron signos devenidos de la privación de cuidados apropiados.
Por otro lado, se compartió también la preocupación por la práctica de los denominados “rescates”. Mediante operativos callejeros, operadores de organismos de gobierno, se lanzan a la busca de niños y niñas que estén en la calle, aún con sus madres, en actividades de sobrevivencia. En efecto, algunos de ellos se encuentran pidiendo monedas, o vendiendo pequeños objetos o son utilizados en situaciones de explotación. Todos corren la misma suerte: son capturados y llevados luego a centros de internación.
Las ongs compartieron su aflicción e interés por aportar a mejores respuestas, que impliquen respeto y apego a la protección de derechos humanos.
Visita a la Asociación Nuestros Ahijados en Antigua, Guatemala
Esta organización trabaja en Antigua hace unos veinte años. Su labor se destaca por el importante trabajo comunitario que allí desarrollan. En sus instalaciones cuentan con una escuela, a la cual concurren niños en situación de pobreza de la ciudad y un centro médico que da asistencia clínica, pediátrica y odontológica. Este servicio de salud integral comunitario, se complementa con talleres y encuentros con familias de la comunidad, desde una visión preventiva. La organización cuenta con un comedor y provee alimentos a las familias, mejorando las condiciones del desarrollo en familia de niñas y niños.
Además de estos programas con una fuerte impronta comunitaria y de fortalecimiento familiar, Nuestros Ahijados tiene un proyecto de acogimiento familiar. Actualmente, tienen cerca de 20 familias de acogimiento, las cuales fueron acreditadas por el programa de familias sustitutas de la secretaría de bienestar social, a partir de la firma de un convenio entre ambas.
Relaf tuvo la oportunidad de tener un encuentro con una de las familias. Su experiencia se encuentra en el apartado de “Experiencias de Familias de Acogimiento en América Latina en nuestra página web.
Reunión con Fundación Sobrevivientes en Guatemala
Esta organización es dirigida por Norma Cruz, cuya misión es el enfrentamiento de la violencia contra la mujer y el combate a la trata de personas, también de niñas y niños. Sobrevivientes tiene varias áreas de trabajo, sus equipos atienden a las víctimas y familiares de manera integral: atención social (servicios de salud, albergue, mejora de las viviendas, educación y bolsas de trabajo); atención psicológica; atención jurídica (rama civil y rama penal de persecución a los agresores, buscando que las mujeres víctimas accedan a la justicia); sistematización (elaboración de estudios y protocolos) e incidencia y sensibilización. Según su informe 2009, en dicho año se efectuaron 16.090 atenciones. En relación al derecho a vivir en familia y comunidad, Norma Cruz trasmitió que desde la Fundación, en los casos de niños, niñas y adolescentes huérfanos de madres por violencia, se trabaja fuertemente con la familia extensa, para que puedan asumir el cuidado de estos niños, evitando la institucionalización innecesaria. En este sentido, además de la asistencia directa al niño, el apoyo, acompañamiento y supervisión de la familia extensa es fundamental en estas intervenciones. Para ello trabajan también con el Juzgado de Familia, haciendo que tíos o abuelos puedan obtener la custodia legal de los niños. Se conoció así una experiencia muy valiosa, que entre otros recursos acude al acogimiento de niños y niñas en sus familias extensas en situaciones de violencia social muy críticas.
